Jesús Ruiz es comercial de seguros de profesión y técnico de sonido por vocación. Hace poco tiempo que este inquieto joven granadino se embarcó en una peculiar aventura: crear una agrupación que reuniera a las numerosas bandas de música que esta inquieta ciudad acoge.

De esta manera nació la Asociación de Grupos de Música de Granada de la que Ruiz es presidente, una iniciativa que apoya directamente la concejalía de Juventud del Ayuntamiento de Granada y que entre otras cosas, es la responsable de festivales como el ‘Enrédate-AGM’. Jesús Ruiz habla con el entusiasmo de quien disfruta con la música y ve en ella algo más que un mero entretenimiento, no en vano es bajista del grupo Babel y entre ‘lio’ y ‘lio’ ha tenido tiempo para tomarse algo con nosotros.

Cuéntenos un poco. ¿Qué es y a qué se dedica la Asociación de Grupos de Música de Granada (AGM)?

Nuestro objetivo es unir fuerzas para remar todos juntos y congregar a cuantos más grupos de música mejor. Por ejemplo, intentamos que las bandas no tengan que pagar para tocar en las salas, porque consideramos que la música es cultura, y ya es triste que no te paguen por actuar, pero más triste aún es que tú tengas que pagar para que te dejen tocar. Somos una agrupación que no tiene ánimo de lucro, la intención es ayudar a los grupos, organizar conciertos…

¿Cuánto tiempo lleva la Asociación en marcha?

En diciembre hará un año. En todo este tiempo hemos reunido entorno a 150 ó 160 bandas. Nuestra pretensión es llegar a todos los grupos, solistas y cantautores de ciudad y provincia, sin importar su estilo.

¿Cómo ve la situación de la música en Granada a día de hoy?

Ahora mismo todo el tema de la música está complicado, no sólo aquí sino en todos lados. Sin embargo, Granada en este sentido es un referente en Andalucía. Tengo la experiencia de haber hablado con otros artistas de fuera de la ciudad y siempre me dicen que quieren venir a tocar aquí.

Granada tiene salas para actuar pero muchas de las quejas de los grupos van encaminadas a los pocos locales de ensayo que hay en la ciudad…

Ese es el problema, que hay pocos o ninguno y los que hay están saturados. Está clarísimo que es una preocupación de los grupos. Yo toco en un grupo que se llama Babel y ensayamos a casi cincuenta kilómetros de Granada… Desde AGM por supuesto que estamos interesados en que haya algo municipal, tanto salas de ensayo como de conciertos. Creemos que es la mejor alternativa del botellón. Por otro lado nosotros intentamos llegar a acuerdos con las salas de directos para que no cobren a los grupos de la asociación, como ‘Sugar Pop’, que se ofreció a dejarnos su espacio gratis e incluso ‘Organ Jazz’, que paga algo por las actuaciones. Estos lugares apuestan por la música y se lo agradecemos.

¿Resulta complicado promover la música y a los grupos?

Resulta difícil y más si cabe cuando las salas están funcionando. Los grupos pagan por que les interesa tocar, además es lógico; se juntan dos bandas, hacen un concierto entre ellos, corren con los gastos a medias… es complicado cambiar eso. Creemos que si conseguimos aglutinar a todos los grupos de Granada podremos hacer fuerza.

¿Hace falta en la ciudad un punto de referencia para todas estas bandas?

Sería muy interesante que hubiera un lugar de estas características para la gente de aquí, porque al fin y al cabo son los músicos de la ciudad los que llenan las salas de conciertos.

Por cierto, ¿Qué tal fue el Primer Festival AGM-Enrédate?

Demasiado bien para lo que esperábamos. Lo organizamos en el Centro Cívico del Zaidín y lo cierto es que salió todo redondo, desde la organización hasta la empresa encargada del sonido, que se portó genial. Pero el mayor éxito fue la asistencia, porque el festival comenzaba a la misma hora que el partido de la selección en la Eurocopa, los exámenes de selectividad eran a los pocos días y sin embargo acudieron 1.200 personas durante las ocho horas de concierto. Todo fueron grupos noveles y la gente respondió muy bien.

Ya estarán liados con el segundo…

Por supuesto. Queremos aumentar la asistencia de público y todavía no sabemos dónde lo vamos a organizar, pero estamos en negociaciones para que sea en un sitio más amplio, aunque no descarto el Centro Cívico; allí nos trataron muy bien y es un lugar para acoger conciertos es estupendo, pero sí es verdad que hubo un momento en el que parecía que se nos quedaba pequeño. En este sentido María Francés, la concejala de Juventud, nos está echando una mano. Quizá reduzcamos un poco el número de grupos, y lo dejemos en seis para que no se haga demasiado largo. Lo que está claro es que será en abril.

Al margen del festival, ¿Qué están preparando para el año que viene?

Ahora mismo estamos organizando un concurso de directos. Todo el que quiera apuntarse es bien recibido. Lo que pretendemos es valorar es la actuación del grupo, no la maqueta. Además será el público el que vote a sus grupos favoritos a través de papeletas y el premio rondará los 800 euros o algo así, a parte de que la final que será en una sala de música grande con todo lo que ello conlleva.

Para terminar le vamos a poner en un compromiso, ¿qué grupos de los que conoce pueden tener mayor proyección fuera de Granada?

Hay muchísimos grupos que tienen mucho potencial. ‘Los vecinos del callejón’ por ejemplo, que están dentro de la AGM y nos apoyan un montón. No he escuchado a todos los grupos que están dentro de la asociación, pero por mencionar algunos se me ocurren ‘Ladrillo’, ‘La barca de Sua’, ‘Time’… el subirte a un escenario ya merece respeto y admiración.